El alimentador es un accesorio ideal para dar a tu bebé trozos de fruta, verdura, galletas, etc., evitando el riesgo de ahogo por la ingestión de trozos demasiado grandes para ellos. El alimentador tiene una malla fina que evita que los trozos de comida se atasquen en la garganta del bebé, y tiene un mango que facilita la sujeción del alimentador. El alimentador es fácil de limpiar, simplemente se puede lavar con agua y jabón. No utilices productos abrasivos para limpiar el alimentador, ya que pueden dañar la malla. Desecha el alimentador al primer signo de deterioro o fragilidad.
- Supervisa siempre a tu bebé cuando esté comiendo con el alimentador.
- No dejes que tu bebé use el alimentador solo.
- Corta los alimentos en trozos pequeños, del tamaño de un guisante.
- Evita dar a tu bebé alimentos duros, como manzanas o zanahorias, ya que pueden romperse en trozos pequeños y ser un peligro de ahogo.
- Si tu bebé tiene problemas para comer con el alimentador, consulta con tu médico.
